Nuestros cítricos ecológicos se cultivan en la Ribera Alta del Xúquer, en un territorio con siglos de tradición. En el Bressol bio producimos naranjas, mandarinas, limones y pomelos de máxima calidad. Mantenemos un sistema de producción artesanal en nuestros campos, parcelas que son minifundios históricos que queremos conservar respetando la biodiversidad
A la excelencia de nuestros cítricos en el Bresssol bio unimos la responsabilidad de mantener y conservar el patrimonio arquitectónico, un entorno vinculado al bicentenario cultivo de la naranja que ha dibujado un paisaje icónico.
Nuestros cítricos se identifican con nuestras etiquetas el Bressol bio, una garantía de que nuestra producción está sometida a la certificación ecológica del Comité de Agricultura Ecológica de la Comunitat Valenciana (CAECV) y además ofrecen un valor añadido de nuestra marca de calidad el Bressol Bio.
EL BRESSOL BIO TRADICIÓN Y ECOLOGÍA LLEVAN A TU MESA CÍTRICOS ÚNICOS
Cultivo artesanal con raíces históricas.
Certificados por el Consejo de Agricultura Ecológica de la Comunidad Valenciana y El Bressol Bio.
Ecológicos, respetuosos con la naturaleza, el paisaje y el patrimonio cultural.
La calidad de los cítricos El Bressol Bio nace del respeto y del cuidado de la tierra que nos hace singulares.
Nuestros cítricos están certificados con los controles de calidad del Consejo de Agricultura Ecológica de la Comunidad Valenciana (CAECV).
En El Bressol Bio disponemos de un reglamento técnico y un compromiso paisajístico que suponen un valor añadido a nuestros frutos:
- Uso de técnicas de cultivo tradicionales.
- Conservación de la flora y la fauna locales, con especial atención a los árboles centenarios.
- Superficie de cultivo siguiendo el modelo minifundista histórico.
- Respeto a los derechos laborales de los trabajadores del campo.
- Conservación de la arquitectura rural.
- Mantenimiento de las infraestructuras de riego históricas.
El trabajo tradicional sobre la tierra y sus cubiertas vegetales son la mejor garantía de nuestro respeto por la biodiversidad:
- Aplicando técnicas de poda artesanal que mejoran sustancialmente la calidad de nuestra fruta.
- Con una fertilización orgánica que enriquece la estructura natural del suelo.
- Los tratamientos fitosanitarios son de origen natural y solo se aplican en casos excepcionales.
- El desbroce de nuestros campos es manual.
EL BRESSOL BIO DIVERSIDAD VARIETAL DE CÍTRICOS
Un cítrico para cada época del año, de noviembre a mayo disfruta de nuestras exquisitas variedades.
LA NARANJA, LA REINA CÍTRICA
EL LIMÓN, LA ACIDEZ EXQUISITA
LA MANDARINA, EL CÍTRICO MÁS DULCE
EL POMELO, EL DULZOR ÁCIDO
EL BRESSOL BIO, LA APUESTA POR EL MINIFUNDIO HISTÓRICO LOS PRIMEROS CÍTRICOS DE EUROPA DESDE 1781
Las naranjas modelan un paisaje único.
Un ecosistema en perfecto equilibrio entre los usos agrarios y un hábitat sostenible.
Un producto vinculado al paisaje y al patrimonio
Los minifundios históricos de naranjas El Bressol Bio son pequeñas parcelas de explotación familiar que no superan, en muchos casos, la hectárea de superficie. Esta estructura minifundista ha sido una constante desde los inicios del cultivo de la naranja en la comarca en 1781.
Lejos de ser una desventaja, los minifundios han permitido una atención personalizada a cada árbol, manteniendo técnicas tradicionales que se basan en el conocimiento íntimo del terreno y del ciclo de vida de los naranjos.
Nuestros campos no solo producen cítricos, también mantienen vivo un paisaje único donde cada elemento
tiene su función en un ecosistema centenario.
Los sistemas de riego por acequias, heredado de la cultura árabe, nos ha legado infraestructuras únicas para extraer el agua por gravedad del rio Xúquer. El azud de Carcaixent (L’Assut) es una construcción hidráulica del siglo XVII que sigue plenamente en funcionamiento.
Con la proliferación de los naranjos en el siglo XIX se excavaron pozos para extraer agua mediante las norias, movidas en primero momento por tracción animal, posteriormente con máquinas de vapor y finalmente con electricidad.
Las casas de campo, muchas de ellas con siglos de historia, merecen una atención especial porque dibujan un paisaje asociado al huerto-jardín, un concepto de producción agraria que únicamente podrás encontrar en nuestra comarca. Casas rodeadas de naranjos que conservan palmeras datileras y ejemplares de árboles de gran porte, algunos de ellos centenarios. Este paisaje exótico forma parte del patrimonio emocional de muchas generaciones que han cultivado cítricos en la comarca.
Mantener estas infraestructuras y el paisaje es también parte de nuestro compromiso con el medio ambiente y la tradición.
Cuando consumas nuestros productos El Bressol Bio estás ayudando a que ese patrimonio perdure.
EL BRESSOL BIO EN LA COMARCA DE LA RIBERA ALTA DEL RÍO XÚQUER
PAISAJE ENTRE NARANJOS Y PALMERAS
EN PRIMAVERA LA FLOR DE AZAHAR Y SU AROMA INUNDAN LOS SENTIDOS
EL BRESSOL BIO, LOS ORÍGENES
EN LA CUNA DE LA NARANJA DESDE 1781 LA HERENCIA DEL ESFUERZO DE NUESTROS ANTEPASADOS
Aunque la naranja se conocía en Asia y en la cultura musulmana por sus usos ornamentales asociada a los jardines, la historia de la naranja dulce empieza en Carcaixent en el año 1781 con la plantación de los primeros naranjos con una finalidad alimentaría y comercial.
Este cultivo pionero se extendió rápidamente, transformando la economía y el paisaje de la zona. Se creó un sistema de regadío, alimentado por el agua del río Xúquer que convirtió antiguas tierras de secano en huertos fértiles.
A lo largo del siglo XIX, Carcaixent y la Ribera Alta de Xúquer se consolidó como referente mundial en la producción de cítricos, asociando su nombre a la calidad y la excelencia. Este legado histórico de calidad es lo que defiende nuestra marca el Bressol Bio: en el origen de la naranja.